SOBRE MI...

Hola, mi nombre es Dilan Ochoa, tengo 15 años y actualmente vivo en Madrid, Cundinamarca.
Me gustan mucho los videojuegos, la música, el dibujo, el arte y la animación. También disfruto conocer gente nueva, coleccionar figuras, explorar la tecnología moderna y ser creativo en lo que hago. Por otro lado, no me gusta leer libros, ni faltar al respeto. Tampoco me agrada la gente prepotente ni las modas tontas.

En mi infancia recuerdo que mis papás siempre fueron amorosos y me enseñaron a ser una persona respetuosa. La mayor parte del tiempo ellos trabajaban, mientras yo estudiaba o alguien más me cuidaba.Desde pequeño me he considerado bueno en el colegio porque me gusta ser cumplido con mis responsabilidades. Una de las cosas que recuerdo, aunque de manera muy vaga, es el fallecimiento de mi hermana menor, cuando yo tenía tres años.
Con el tiempo fui descubriendo mis gustos, como la música y la tecnología. Desde muy pequeño empecé a interactuar con ella, especialmente con YouTube y algunos videojuegos sencillos.

Me encantan los videojuegos, desde pequeño los jugaba muchísimo como pasatiempo, y especialmente les tengo cariño a los de acción. También me gusta mucho el arte y el dibujo. Siento que tengo buena habilidad para crear personajes y escenarios, y uno de los estilos que más admiro es la combinación entre 2D y 3D, tanto en el dibujo como en la animación. Otro de mis hobbies es investigar cosas nuevas o explorar temas de los que sé muy poco. Además, desde pequeño me gusta coleccionar minifiguras tipo Lego, un pasatiempo que todavía disfruto. En cuanto a la comida, tengo un gusto muy marcado por la pasta, preparada de cualquier forma. Amo a los animales, especialmente a los gatos y perros. De hecho, actualmente tengo dos gatas como mascotas, que se llaman Bella y Perla. Por otro lado, hay varias cosas que no me gustan: las personas prepotentes, molestas o insistentes, las faltas de respeto, y la gente que se cree mejor que otros por su estatus social. Y, por último, algo muy personal: no me gusta bailar, porque me parece bastante incómodo.

De mi familia no puedo decir demasiado, pero sí algo importante: además de mis padres, mis abuelos y mi tío paterno me han acompañado toda la vida. Ellos me han enseñado a ser una persona de bien y siempre me han brindado cariño, no en lo material, sino en lo sentimental, con consejos y apoyo.
Mi familia también me inspira mucho a pensar en mi futuro y en seguir haciendo las cosas bien en el camino que elija. Por otro lado, debo decir que hay varias personas de mi familia que no conozco muy bien.

En la pandemia recuerdo que, al principio, sentía bastante miedo por todo lo que estaba ocurriendo en el mundo. Tenía mucho cuidado con la higiene y con cada detalle del día a día. Ese mismo año me gradué de primaria, aunque, como las clases fueron virtuales durante dos años, no volví a la presencialidad hasta séptimo grado. Algo que también recuerdo es que no pasé todo el tiempo dentro de casa. Varias veces visité a mis abuelos y a mi hermano mayor. Fuera de las clases virtuales, lo que más hacía era jugar y empezar a conocer más a fondo las redes sociales.